El pasado 23 de Marzo se celebró la V Vuelta a Sierra Espuña, una prueba organizada por el Club Senderista Totana que por 5º año daba cita a los amantes de la montaña en el paradigma de la sierra de nuestra provincia. Se trata de una prueba no competitiva que este año estrenaba un tramo competitivo que consistía en ascender un cortafuegos con 400m de D+ en menos de 1km. El que menos tiempo realizara en ese tramo cronometrado sería el ganador.
Como un estreno ideal para empezar la temporada de trail, por el perfil suave (2000m D+ en 54km), el paraje con paisajes espléndidos, y el carácter no competitivo, seleccionamos la carrera como un buen entrenamiento de cara al Desafío Lurbel y La Ruta de las Fortalezas que nos esperaban en Abril. Además sirvió de estreno en ultra-trail para un buen amigo, Jesús, y para mi hermana y mi cuñado, que habiendo hecho RDLF, no habían hecho nunca un ultra de pura montaña.
Equipado con mis Inov-8 Trailroc 245 para probarlas de cara los ultras de Abril y Mayo, a las 07:00h tomamos la salida con un ambiente distendido y animado, recorriendo los primeros 2km por las afueras de Totana de forma neutralizada por el tema del tráfico. Enseguida pasamos a los senderos de montaña en sentido ascendente y la gente ya comenzaba a trotar. Íbamos tranquilos y no queríamos desfondarnos, así que a nuestro trote fuimos cogiendo sitio en carrera.
Hasta el km13 discurría en una subida constante pero suave, y luego daba una tregua hasta el km17, en el que empezaba el tramo cronometrado de ascenso. En ese segmento de llaneo reservo energías y tomo un gel para intentar hacer un buen papel en la subida cronometrada, más por probarme a ver como estoy para subidas exigentes que para disputar la general. Empieza el tramo cronometrado y enseguida me veo fuerte, íbamos en torno al puesto 20-25 y adelanto a mucha gente en los primeros minutos de subida. A los 10' ya empiezo a ir un poco justo y dosifico porque no sé cuanto me queda, y antes de darme cuenta hemos terminado, se había pasado antes de lo que esperaba. Arriba espero a Carlos y Jesús que llegan unos 3min después.
En ese punto se realizaba un cresteo precioso, técnico pero muy bonito, con unas vistas impresionantes. Dsifruto mucho en ese punto. A continuación pasamos por el avituallamiento del km25, donde comemos lo necesario y charlamos con los voluntarios, con foto de grupo incluida. Ya ha pasado lo peor y quedan 27km pero casi en contínua bajada. Empezamos la bajada en su tramo más técnico, precioso, vamos volando, pero de pronto Jesús se tuerce el tobillo. Leches!. Nos paramos y parece que no puede continuar. Decidimos acompañarlo hasta el siguiente avituallamiento para que lo evacuen una vez llegue, pero el tobillo va calentando y decide que no va a abandonar en su primer ultra. Decisión valiente, aunque de dudosa inteligencia... jajaja. Los ultrafondistas somos un poco así.
Hacer 25km con un esguince no es muy recomendable, pero lo afronta con entereza y salvo bajadas técnicas mantiene un buen ritmo que hace que sigamos en torno a los 20 primeros. Comemos un plato de pasta en torno al km35 con un excelente servicio de avituallamiento y sus voluntarios. Y seguimos con determinación hasta meta. La última subida de casi 200m de D+ se le hace dura a Jesús, no por el esguince, sino por los km acumulados y el calor, pero llegamos arriba y ya sólo quedan 10km de bajar por pistas sencillas hasta meta. Vamos mejorando el tiempo que teníamos previsto (unas 7h36'), y Carlos se ve fuerte y con ganas de apretar pero lo freno para esperar a Jesús y entrar juntos. Al final entramos los 3 de la mano en 7h05', entre los 20 primeros. Una gran experiencia correr los 3 juntos por un sitio tan bonito y a un ritmo llevadero que hace que disfrutes aún más de la experiencia.
Nada más llegar me comunican que he sido el ganador del tramo cronometrado, con un tiempo de 17'11", a más de 1min30 del 2º clasificado. No me lo esperaba. Un gran masaje de la gente de fisioterapia que me deja nuevo y una merecida ducha con agua caliente y recibo por parte de la organización unos productos de la tierra junto al que llegó en primer lugar en la carrera, el compañero de correrdescalzos, franmen, que hizo la prueba con unas Baregrip 200 en poco más de 6h. Extraordinario!. Los minimalistas al poder.
Enseguida entran mi hermana y mi cuñado en un excepcional papel terminando en 8h50' demostrando que están mucho mejor preparados que el año pasado a estas alturas y que la RDLF va a ser un paseo. Enhorabuena a ambos.
Como reflexión final con respecto al minimalismo y al evento que sufrió Jesús decir que en montaña es muy frecuente sufrir torceduras de tobillo, y que he comprobado en primera persona desde que uso zapatillas de perfil plano que se reducen drásticamente con ese tipo de calzado. Una ventaja más del minimalismo.
Muy buena Cronica Emilio!!!!!! ahora a por las Fortalezas... :)
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo con lo de las torceduras. Se baja un poco más lento y es un poco más doloroso al clavarte alguna piedra, pero es mucho más seguro porque al estar más pegado al suelo es mucho más difícil tener una torcedura. Cada vez que he vuelto a las amortiguadas he estado a punto de torcerme el tobillo en las bajadas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Buen entreno para las fortalezas. Un saludico.
ResponderEliminarEnhorabuena !
ResponderEliminarPor cierto el 1º con unas baregrip 200 admirable, hace algunos meses participé en la Yeti trail en Sª Espuña con una vivobarefoot breatho y en algunos tramos las pasé un poco canutas y eso que esta carrera tiene 10 kms más que la Yeti.
Un saludo
Gracias!. Si, el 1º como digo fue franmen, Paco Mendoza, conocido usuario de correrdescalzos.es que suele quedar entre los 3 primeros en carreras tipo La Sagra Sky Race, etc. Una máquina, vamos.
Eliminar